Un ataque militar ordenado por el presidente Trump dejó cuatro presuntos narcotraficantes muertos, en la duodécima operación de este tipo durante el año.
En el marco de su campaña ampliada contra el narcotráfico, el gobierno de los Estados Unidos anunció la destrucción de otra embarcación sospechosa, identificada como una «narcolancha». Según un comunicado del secretario de Guerra, Pete Hegseth, la operación, calificada como un «ataque cinético letal», resultó en la muerte de cuatro presuntos narcotraficantes y la explosión total de la nave, que se encontraba en aguas internacionales del Pacífico Oriental.
Hegseth afirmó que la embarcación, atribuida a una Organización Terrorista Designada (OTD), fue previamente identificada por los servicios de inteligencia y se desplazaba por una «ruta conocida de narcotráfico» transportando estupefacientes. La publicación oficial estuvo acompañada de un video de 22 segundos que muestra el impacto explosivo. Con este incidente, suman doce las operaciones similares ejecutadas este año bajo la administración Trump, con un saldo total de 61 presuntos narcotraficantes muertos. El gobierno estadounidense justifica estas acciones como medidas necesarias de seguridad nacional para proteger sus costas de la entrada de drogas, mientras que críticos las señalan como ejecuciones extrajudiciales que eluden los procesos legales.













