El cantante Eduardo Antonio defiende a los portadores de este estatus migratorio en EE.UU., destacando que son personas que huyeron de la dictadura en busca de libertad y criticando los estigmas injustos.
El conocido artista cubano Eduardo Antonio, «El Divo de Placetas», se ha convertido en portavoz de los miles de migrantes cubanos que se encuentran en Estados Unidos con un estatus I-220A, viviendo en un limbo legal y bajo el estigma de ser considerados delincuentes. A través de sus redes sociales, el cantante envió un contundente mensaje de solidaridad: “Es de nefastos juzgar justos por pecadores. Todos los I-220A no son delincuentes, vinieron aquí buscando libertad, salir de una dictadura y buscando prosperidad”.
El Divo, quien también emigró y se acogió a la Ley de Ajuste Cubano, reveló que este tema le toca personalmente, ya que su esposo, Roy García, es uno de los portadores de este estatus. “Conozco a muchos que como él son dignos, decentes, honrados, trabajadores y grandes personas”, afirmó. Criticó con dureza a quienes juzgan sin conocer las historias de sacrificio detrás de cada migrante y recordó que muchos de los I-220A fueron, incluso, manifestantes en las protestas del 11 de julio de 2021 en Cuba. Reafirmando su identidad, sentenció: “Yo nunca voy a traicionar mi raza… a mí me duele Cuba y todo lo que pasa en Cuba y me duele todo lo que le pase a los I-220A”.














