David Cox fue arrestado en medio de las masivas protestas en Manhattan tras, supuestamente, braggar en una gasolinera sobre su plan de «luchar contra agentes de ICE».
Un hombre del norte del estado de Nueva York fue arrestado en la ciudad de Nueva York el sábado por la tarde después de que, presuntamente, afirmara que tenía cócteles molotov y planeaba usarlos en una protesta «No Kings» para atacar a agentes federales. El arresto se produjo en un día en el que algunas de las protestas contra Trump en Estados Unidos se descontrolaron. David Cox, de 54 años, fue acusado de cargos de terrorismo después de que, según la policía y fuentes, se jactara ante un desconocido en una gasolinera Kwik Fil en Owego —a unas 198 millas de la Gran Manzana— el viernes por la noche, de que llevaba armas en su maletero y planeaba «luchar contra agentes de ICE» en una manifestación en Manhattan.
El testigo, un transeúnte anónimo, reportó la amenaza a la policía después de que Cox abandonara la gasolinera. El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) localizó al hombre de Newark Valley después de que un lector de matrículas identificara su vehículo, y lo arrestó alrededor de las 2:25 p.m. del sábado mientras aproximadamente 100,000 personas se manifestaban en Midtown. La policía indicó que no se encontraron cócteles molotov ni otras armas en su vehículo. Cox fue acusado de realizar una amenaza terrorista, realizar un falso reporte de terrorismo y realizar una amenaza de daño masivo.
Decenas de miles de manifestantes de «No Kings» inundaron Manhattan y otras ciudades del país el sábado, coreando consignas contra el presidente Trump y sus políticas, y ondeando carteles con mensajes vulgares. Los manifestantes, que exigían la renuncia del presidente, también criticaron duramente a los agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de EE.UU., comparando a la agencia federal con el KKK. Mientras que no se realizaron arrestos en Manhattan, las protestas en otras partes del país, como Portland, descendieron al caos y las autoridades federales se vieron forzadas a usar gas pimienta para dispersar a una multitud alborotadora que se volvió violenta.
