Alain Toledano Valiente fue interceptado y rechazado por autoridades de inmigración en el aeropuerto de Santiago de Cuba, impidiéndole el reencuentro con su familia y su hija que padece cáncer.
En un acto que califica como un «destierro forzoso», el pastor evangélico Alain Toledano Valiente, residente en el exilio, fue impedido de entrar a Cuba por segunda ocasión cuando intentaba visitar a su hija, quien enfrenta una batalla contra el cáncer. Toledano relató a través de sus redes sociales que, tras volar hasta Santiago de Cuba, fue detenido en el control de inmigración y no se le permitió la entrada al país.
«Los tiranos me esperaban, todo el show echó a andar, me detuvieron en Inmigración y no me permitieron entrar. Estoy siendo desterrado por segunda vez de mi propio país», denunció el religioso. En su emotivo mensaje, acusó a las autoridades de «deleitarse en dañar a la familia cubana» y realizar «cualquier tipo de crimen por preservar su poder». Aseguró que regresará a Cuba «pronto», pero solo cuando esté «libre de tiranos asesinos». Este caso evidencia las duras restricciones que sufren los disidentes y críticos del gobierno, incluso en circunstancias humanitarias extremas.













