La industria del turismo en Las Vegas, famosa por su opulencia y entretenimiento ininterrumpido, se enfrenta a una preocupante disminución en la afluencia de visitantes durante el verano actual. Las cifras de ocupación hotelera y el número de turistas internacionales han experimentado caídas significativas en comparación con el año anterior. Diversos operadores del sector turístico y funcionarios locales señalan como posibles causas de este declive las políticas migratorias y los aranceles implementados por la administración de Donald Trump, argumentando que estas medidas están disuadiendo a visitantes clave, particularmente de mercados internacionales como Canadá y México.
Los resorts y centros de convenciones de la ciudad han registrado una menor cantidad de turistas, lo que ha llevado a una reducción general en la actividad económica. En junio, Las Vegas acogió a poco menos de 3,1 millones de visitantes, lo que representa una disminución del 11% respecto al mismo mes del año anterior. De manera más alarmante, el número de viajeros internacionales se redujo en un 13%, y la ocupación hotelera disminuyó aproximadamente un 15%, según los datos recopilados por la Autoridad de Convenciones y Visitantes de Las Vegas. Esta tendencia plantea interrogantes sobre la efectividad de ciertas políticas económicas y su impacto directo en uno de los destinos turísticos más emblemáticos de Estados Unidos.
Los operadores turísticos y funcionarios de Las Vegas han expresado su preocupación por la baja afluencia de visitantes.
Mexicanos y canadienses evitan Las Vegas
La alcaldesa Shelley Berkley ha sido una de las voces más críticas, señalando que el turismo proveniente de Canadá, uno de los principales mercados internacionales para Nevada, ha pasado de ser un flujo constante a un simple goteo. Una situación similar se observa con los visitantes de México. Berkley comentó a la prensa que «tenemos varios grandes apostadores que vienen de México y no están muy interesados en venir en este momento. Y esa parece ser la actitud predominante a nivel internacional», lo que sugiere una percepción negativa generalizada hacia Estados Unidos entre ciertos segmentos de turistas internacionales.
Ted Pappageorge, quien lidera el influyente Sindicato de Trabajadores Culinarios, ha acuñado el término «la caída de Trump» para describir esta situación. Según Pappageorge, las políticas migratorias restrictivas y la retórica del gobierno estadounidense están generando un clima de temor, especialmente entre las comunidades latinas del sur de California, lo que se traduce en una menor afluencia de visitantes. «Si le dices al resto del mundo que no son bienvenidos, no vendrán», afirmó Pappageorge, destacando la importancia de la percepción en la industria turística.
La preocupación de Pappageorge subraya el impacto directo que las políticas gubernamentales pueden tener en la economía local, especialmente en ciudades altamente dependientes del turismo internacional como Las Vegas. La percepción de ser «no bienvenido» puede ser un disuasivo poderoso para los viajeros, que buscan experiencias positivas y seguras en sus destinos de vacaciones.
Una tendencia que se extiende por todo el país
La situación en Las Vegas no es un fenómeno aislado, sino que refleja una tendencia nacional más amplia. La consultora especializada en pronósticos de viajes, Tourism Economics, que inicialmente proyectó un aumento del 9% en las llegadas internacionales a Estados Unidos para este año, ha revisado sus estimaciones a la baja, previendo ahora una caída del 9,4%. Esta revisión a la baja se atribuye en gran medida a los cambios en las políticas migratorias y comerciales, y se espera que los mercados de Canadá sean particularmente afectados.
Canadá ha sido históricamente uno de los mayores emisores de turistas hacia Estados Unidos, con más de 20,2 millones de visitantes en 2024, según cifras oficiales. Sin embargo, los datos de las principales aerolíneas canadienses, como Air Canada y WestJet, muestran una disminución considerable en el número de pasajeros que llegan al Aeropuerto Internacional Harry Reid de Las Vegas. Air Canada reportó una caída del 33% en sus pasajeros en junio, mientras que WestJet experimentó una reducción del 31% en el mismo período. La aerolínea de bajo costo Flair también registró una caída drástica del 62% en sus operaciones hacia Estados Unidos.
Las agencias de viajes en Canadá han corroborado esta tendencia, informando sobre una disminución significativa en el número de clientes interesados en visitar Estados Unidos en general y Las Vegas en particular. Wendy Hart, una agente de viajes de Windsor, Ontario, sugirió que el «orgullo nacional» podría estar jugando un papel, especialmente después de las declaraciones del presidente Trump sobre la posible integración de Canadá como el estado número 51 de Estados Unidos. Este sentimiento de «orgullo nacional» puede influir en las decisiones de los viajeros canadienses, llevándolos a buscar destinos alternativos.
El impacto de los aranceles y la percepción de valor
Wendy Hart también señaló que los aranceles impuestos por la administración Trump podrían estar contribuyendo al aumento general del costo de vida y, por ende, de los viajes. «Los aranceles también son un problema importante. Parecen estar contribuyendo al aumento del costo de todo», explicó. Esta percepción de un mayor costo de vida en Estados Unidos podría ser un factor disuasorio adicional para los turistas internacionales.
Derek Stevens, propietario y director ejecutivo del Circa Resort and Casino, ubicado en el corazón de Las Vegas, ha observado una disminución en las visitas internacionales, especialmente de Canadá y Japón. Sin embargo, Stevens también señaló que esta caída se produce después de un período de recuperación post-pandemia, y que las cifras de juegos de azar, en particular las apuestas deportivas, se mantienen sólidas. Esto sugiere que, si bien la afluencia general de turistas podría haber disminuido, el gasto en actividades específicas como el juego sigue siendo robusto.
La disminución en el atractivo de Las Vegas como destino principal también se refleja en clasificaciones como la lista anual de los 10 mejores destinos para el Día del Trabajo de la AAA. Este año, Las Vegas ha caído al último puesto, desde la sexta posición que ocupaba en 2024. Ciudades como Seattle y Orlando, así como Nueva York, han ganado terreno en popularidad, indicando un posible cambio en las preferencias de los viajeros o una mayor competitividad de otros destinos.

La alcaldesa Shelley Berkley también ha hecho hincapié en el aumento de los costos de los bienes y servicios en Las Vegas como un factor que aleja a los turistas. «La gente siente que les están sacando el dinero a raudales y que no obtienen el valor por su dinero», declaró. En respuesta, Berkley ha instado a los empresarios locales a considerar la posibilidad de hacer sus ofertas más asequibles, con el objetivo de atraer y retener a los visitantes. «Queremos que los turistas vengan, se diviertan, gasten su dinero y regresen a casa», concluyó la alcaldesa, subrayando la importancia de una experiencia turística satisfactoria para la economía de la ciudad.
A pesar de las afirmaciones de algunos funcionarios sobre la disminución del turismo, visitantes como Alison Ferry, procedente de Donegal, Irlanda, reportaron haber encontrado grandes multitudes en los casinos y el Strip de Las Vegas. Ferry comentó que «hay mucha gente. Ha habido mucha gente en todos los lugares a los que hemos ido. Y hace muchísimo calor», y añadió que no presta mucha atención a la política estadounidense mientras disfruta de su visita.
Consideraciones para el futuro del turismo en Las Vegas
La situación actual del turismo en Las Vegas plantea importantes desafíos para la ciudad, que depende en gran medida de los ingresos generados por los visitantes. Las políticas de la administración Trump, tanto en materia migratoria como comercial, parecen estar teniendo un impacto tangible en la afluencia de turistas internacionales. La percepción de ser «no bienvenido» y el aumento de los costos pueden disuadir a viajeros potenciales, obligando a la industria a buscar nuevas estrategias para atraer y mantener a su base de clientes.
Es crucial que los líderes de la industria turística de Las Vegas analicen a fondo las causas de esta disminución y desarrollen estrategias de adaptación. Esto podría incluir la exploración de nuevos mercados turísticos, la mejora de la oferta de valor para los visitantes, y la adaptación de las políticas de precios para hacer la ciudad más accesible. La colaboración entre el sector público y privado será fundamental para superar estos desafíos y asegurar la prosperidad a largo plazo de la industria turística de Las Vegas. La retroalimentación de los visitantes y la comprensión de sus percepciones son vitales para ajustar las estrategias y garantizar que Las Vegas siga siendo un destino atractivo y competitivo en el panorama turístico mundial.
El análisis de los datos de visitantes, las encuestas de satisfacción y las tendencias del mercado serán herramientas clave para informar las decisiones futuras y asegurar que Las Vegas pueda adaptarse a un entorno cambiante, manteniendo su estatus como un centro global de entretenimiento y turismo.