Mientras brigadas en Niquero amarraron la embarcación histórica, usuarios ironizaron sobre las prioridades del gobierno en medio de una crisis nacional.
Una medida de protección civil en la provincia de Granma desató una ola de críticas y burlas en las redes sociales. Brigadas comunales en el municipio de Niquero, como parte de los preparativos para el huracán Melissa, procedieron a amarrar con sogas la réplica del yate Granma, la embarcación que se exhibe en el Monumento Nacional de Las Coloradas para conmemorar el desembarco de Fidel Castro y sus seguidores en 1956.
La imagen, difundida en un reportaje televisivo y luego compartida por el periodista Rolando Nápoles, no tardó en generar una lluvia de comentarios irónicos y de frustración. Muchos usuarios vieron en la acción un símbolo de las prioridades desviadas del gobierno, que destina esfuerzos a proteger un símbolo histórico mientras la población enfrenta una precariedad crónica y se prepara para un huracán con viviendas inseguras y servicios colapsados.
«Con tanto que hay que resolver, y ellos amarrando la canoa esa, símbolo de la desgracia», escribió un usuario. Otros expresaron deseos de que el huracán «se llevara la réplica y el original», o hicieron referencia sarcástica a la tumba de Fidel Castro en Santiago de Cuba. El tono de los comentarios, entre el humor ácido y la rabia, revela un profundo desencanto social y la percepción de una gran distancia entre las preocupaciones oficiales y la angustiosa realidad cotidiana de los cubanos.















