Xavier Arrue Pinto, educador y miembro del Parlamento, falleció a causa del virus del dengue, una información que, según denuncian, ha sido omitida por los medios oficiales para ocultar la grave crisis sanitaria que afecta a la isla.
La muerte del joven pedagogo y diputado a la Asamblea Nacional, Xavier Arrue Pinto, ha puesto en evidencia la opacidad del gobierno cubano frente a la crisis de salud pública. Aunque los medios oficialistas publicaron una sentida despedida elogiando su labor como profesor y director del proyecto Andando Plus, omitieron deliberadamente que la causa de su fallecimiento fue el dengue.
Una fuente cercana al fallecido rompió el silencio para denunciar la manipulación: «Ya empiezan los rumores de ‘infarto fulminante’. ¡Pura manipulación! Se lo llevó el virus. Y punto». Esta ocultación sistemática de las muertes por dengue y chikungunya impide una conciencia colectiva sobre la magnitud de la emergencia sanitaria, que se ve agravada por la escasez de medicamentos, la falta de fumigación y la carencia de personal médico suficiente. El caso de Arrue Pinto se convierte así en un símbolo de una población que sufre y muere en medio del secretismo estatal.














