La administración Trump otorga un masivo paquete de ayuda financiera a Argentina, generando críticas por su timing político y el uso de fondos públicos durante el cierre del gobierno federal.
El gobierno de Donald Trump ha lanzado un controvertido rescate financiero a Argentina por US$20.000 millones, una decisión que sus críticos califican de más política que económica. El paquete incluye un acuerdo de canje de divisas con el banco central argentino y la compra directa de pesos por parte de la Reserva Federal, medidas excepcionales para estabilizar la economía del país gobernado por el aliado de Trump, Javier Milei.
La decisión llega en un momento particularmente delicado: el gobierno federal de EE.UU. lleva casi dos semanas cerrado, dejando a más de un millón de trabajadores sin pago. «Es inexplicable que el presidente Trump esté apuntalando a un gobierno extranjero mientras cierra el nuestro», declaró la senadora Elizabeth Warren. Los críticos señalan que el rescate beneficiaría principalmente a grandes fondos de inversión con intereses en Argentina y fortalecería la posición de Milei de cara a las elecciones legislativas del 26 de octubre, mientras que los agricultores estadounidenses sufren las consecuencias de la guerra comercial de Trump con China.














