Una veintena de agentes evacuados por su gobierno denuncian que el sistema de salud cubano les exige pagar cada servicio, incumpliendo el contrato de cobertura médica.
Al menos una veintena de policías haitianos, heridos en enfrentamientos con pandillas armadas, se encuentran atrapados en un limbo médico y financiero en hospitales de Cuba. Aunque fueron evacuados oficialmente por el Estado haitiano, el sistema de salud cubano les exige el pago por cada servicio recibido, dejándolos sin atención adecuada y con deudas crecientes.
Según una investigación del medio haitiano AyiboPost, los agentes —muchos con heridas de bala y trauma psicológico— deben costear sus cirugías y medicamentos con recursos propios, debido a que la empresa intermediaria «Good Money», encargada de gestionar los pagos, no ha transferido los fondos a los hospitales cubanos. «Los médicos cubanos no atienden sin el pago correspondiente», afirmó Mathieuny Sidel, portavoz del sindicato policial haitiano SYNAPOHA.
La situación se ha vuelto tan crítica que algunos agentes han interrumpido sus tratamientos por falta de dinero, mientras otros dependen de remesas familiares para sobrevivir. El caso más trágico fue el del inspector Jean Bernard, quien falleció en soledad en un hospital cubano el pasado junio, suplicando ser repatriado para morir junto a los suyos. La crisis refleja las profundas fallas en un sistema de cooperación médica que, en la práctica, deja desprotegidos a quienes arriesgaron su vida en servicio de su país.














