En una nueva muestra de inhumanidad, el régimen cubano impide que un pastor vea a su hija gravemente enferma de cáncer. Alain Toledano Valiente, líder religioso exiliado en Estados Unidos desde 2022, busca desesperadamente regresar a la isla para acompañar a su hija mayor, Susana, de 35 años, quien ha sido diagnosticada con cáncer de mama en estado avanzado y requiere atención urgente.
Toledano ha denunciado públicamente que las autoridades cubanas le han negado la entrada al país, considerándolo una «amenaza para la Seguridad del Estado». Esta prohibición le ha impedido abordar vuelos hacia Cuba, sumiéndolo en una profunda angustia ante la delicada situación de salud de su hija.
«Cada cubano tiene el derecho de estar en su tierra y, si sale, de regresar cuando quiera. No es el derecho de ningún gobernante quitarle ese privilegio a un ciudadano», expresó Toledano en declaraciones a Martí Noticias, subrayando la injusticia de la medida impuesta por el régimen cubano que le impide ver a su hija.
Un Historial de Acoso y el Dolor de un Padre
El pastor Toledano Valiente sufrió más de dos décadas de acoso y persecución por parte de la Seguridad del Estado cubano debido a su liderazgo en el Movimiento Apostólico, una red cristiana protestante no reconocida oficialmente por el gobierno. Estas presiones constantes lo llevaron a exiliarse junto a su esposa y sus dos hijas menores en 2022.
Trágicamente, su hija mayor, Susana, fue diagnosticada con cáncer poco después de la partida de su padre. Actualmente, la joven enfrenta serias complicaciones de salud y requiere una nueva intervención quirúrgica. «Mi anhelo es volver a Cuba para estar a su lado, para apoyarla, para estar ahí y velar por su salud», afirmó Toledano, quien teme por la vida de su hija debido a las conocidas deficiencias del sistema de salud cubano.
A pesar de no tener causas legales pendientes en la isla, el pastor ha sido informado por su abogado en Cuba que su entrada está prohibida. «El régimen declara que soy una amenaza para la Seguridad del Estado», denunció. Incluso, recientemente, se le impidió asistir al funeral de un primo cercano, otra muestra de la crueldad con la que el régimen cubano impide a este pastor ver a su hija y a su familia.
Condena Internacional y la Política de «Destierro Forzado»
Organizaciones internacionales de derechos humanos han condenado enérgicamente la decisión del gobierno cubano. Anna Lee Stangl, directora de Incidencia Política de Christian Solidarity Worldwide (CSW), exigió al gobernante Miguel Díaz-Canel y al ministro del Interior, Lázaro Alberto Álvarez Casas, que levanten de inmediato la prohibición que impide al pastor regresar a su país por razones humanitarias.
El régimen cubano impide a este pastor ver a su hija como parte de lo que muchos activistas y organizaciones denuncian como una política sistemática de “destierro forzado” contra voces críticas. Esta práctica consiste en impedir el regreso al país a disidentes, periodistas independientes y activistas como forma de castigo, control y para silenciar sus denuncias.
En 2022, la curadora de arte y activista del Movimiento San Isidro, Anamely Ramos, fue impedida de abordar un vuelo a Cuba, a pesar de tener boleto y todos sus documentos en regla. Las autoridades migratorias le informaron que el gobierno cubano no le permitía entrar. Ramos ha denunciado que esta medida se debe al temor del régimen a que «lo que digo desde fuera lo diga también desde dentro”.
Una situación similar han enfrentado los hermanos Omara y Ariel Ruiz Urquiola. Omara, activista y profesora universitaria, fue vetada de ingresar a Cuba tras denunciar públicamente la situación de derechos humanos y del sistema de salud. A pesar de padecer cáncer, ha sido separada forzosamente de su familia, generando fuertes críticas internacionales. Su hermano Ariel, biólogo y activista, fue encarcelado y posteriormente autorizado a salir del país tras una huelga de hambre. Desde el exilio, ha expuesto al régimen ante organismos como la ONU y ha sido castigado con la prohibición de reingreso a la isla.
Estas acciones violan flagrantemente el artículo 13 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que establece el derecho de todo ciudadano a regresar a su país. Resultan aún más repudiables en un régimen que se presenta ante organismos internacionales, incluyendo la Organización de Naciones Unidas, como un defensor de los derechos que constantemente quebranta. La práctica del destierro forzado, denunciada por organizaciones como Human Rights Watch y Amnistía Internacional, constituye una forma de represión transnacional.
Claves sobre la Prohibición de Regreso al Pastor Alain Toledano
¿Por qué el régimen cubano niega la entrada al pastor Alain Toledano?
El régimen cubano impide al pastor ver a su hija, Alain Toledano, alegando que es una «amenaza para la Seguridad del Estado». Esta calificación se debe a su liderazgo en el Movimiento Apostólico, una red cristiana no reconocida oficialmente, y a su postura crítica contra el gobierno. La prohibición de entrada se mantiene incluso ante la grave enfermedad de su hija.
¿Es este un caso aislado de prohibición de regreso a Cuba?
No, lamentablemente. El caso del pastor Toledano se enmarca en una política que diversas organizaciones han denominado «destierro forzado», aplicada por el régimen cubano contra activistas, periodistas y otras voces críticas. Figuras como Anamely Ramos y los hermanos Ruiz Urquiola también han sufrido esta medida, que les impide regresar a su propio país.
¿Qué impacto tiene el destierro forzado en las familias cubanas?
El destierro forzado provoca una dolorosa e inhumana separación familiar. En el caso del pastor Alain Toledano, el hecho de que el régimen cubano le impida ver a su hija enferma de cáncer agrava su sufrimiento y el de su familia, poniendo en evidencia la crueldad de estas medidas que vulneran derechos fundamentales.
¿Cuál ha sido la reacción internacional ante estas prácticas?
Organizaciones internacionales de derechos humanos como Christian Solidarity Worldwide (CSW), Human Rights Watch y Amnistía Internacional han condenado consistentemente la política de destierro forzado del régimen cubano. Exigen el respeto a los derechos humanos, incluyendo el derecho de todo ciudadano a regresar a su país, y han instado a la comunidad internacional a presionar a Cuba para que cese estas violaciones.