El gobernador de Florida, Ron DeSantis, promulgó este viernes una nueva ley que prohíbe el uso de teléfonos celulares en las escuelas primarias y secundarias del estado durante el horario lectivo. Esta medida busca ampliar las restricciones ya existentes y fomentar un ambiente de aprendizaje con menos distracciones para los estudiantes.
La ley, identificada como HB 1105, fue aprobada por la Legislatura estatal el pasado 2 de mayo y representa una revisión de la legislación previa que ya limitaba el uso de dispositivos móviles por parte de los estudiantes durante las horas de clase. Con esta nueva normativa, la prohibición se hace más explícita y abarcadora para los niveles de educación primaria y secundaria.
Alcance de la Prohibición y Programa Piloto en Preparatorias
La principal disposición de la ley que prohíbe celulares en escuelas de Florida es la restricción total de su uso durante la jornada escolar en los centros de enseñanza primaria y secundaria. Adicionalmente, la legislación contempla la creación de un programa piloto en seis condados del estado. Este programa experimental prohibirá el uso de teléfonos celulares también en las escuelas preparatorias (high schools) durante el horario escolar, con el fin de evaluar su impacto y posible implementación a mayor escala en el futuro.
El proyecto de ley recibió un amplio respaldo en ambas cámaras legislativas. La Cámara de Representantes de Florida votó 85-14 a favor de aprobar la medida, que incluye una serie de otros temas educativos. Por su parte, el Senado estatal lo aprobó con un resultado de 26-5.
Otros Cambios Educativos Incluidos en la Ley
Más allá de la restricción del uso de teléfonos celulares, la ley HB 1105 también introduce cambios significativos que podrían beneficiar a las escuelas chárter en Florida. Uno de los puntos clave es que exigirá que estas instituciones educativas reciban una parte proporcional de los fondos si los distritos escolares obtienen dinero proveniente del impuesto sobre las ventas a través de lo que se conoce como un impuesto adicional a la infraestructura del gobierno local. Las escuelas chárter recibirían una porción de estos fondos acorde a su matrícula escolar.
Además, la nueva ley facilitará el proceso de conversión de escuelas públicas tradicionales a escuelas chárter. Actualmente, estas conversiones requieren el apoyo mayoritario tanto de los padres de los alumnos como del profesorado del centro. Con la entrada en vigor de esta ley, prevista para el 1 de julio, se eliminará el requisito del apoyo docente para llevar a cabo dicha transición.
Estas medidas reflejan un esfuerzo por parte de la administración de DeSantis y la legislatura de Florida por reformar el entorno educativo, buscando, por un lado, mejorar la concentración y el rendimiento académico mediante la limitación de distracciones tecnológicas, y por otro, fomentar modelos educativos alternativos como las escuelas chárter.