Una mañana de sábado se tornó caótica en Florida City cuando una fuerte explosión, atribuida inicialmente a una fuga de gas propano, sacudió un concurrido centro comercial. El incidente, ocurrido poco antes de las 9:00 a.m. en la cuadra 900 de West Palm Drive, ha dejado un saldo de diez personas heridas, dos de ellas en estado crítico, y una profunda conmoción entre residentes y comerciantes.
El estallido tuvo su epicentro en las inmediaciones de Palm Bakery, un restaurante que, según los informes, aún no había inaugurado oficialmente sus puertas al público. La detonación fue de tal magnitud que provocó el colapso parcial de estructuras, la rotura de cristales y una escena de destrucción que sorprendió a quienes se encontraban en la zona iniciando su jornada.
Testimonios del terror: «Estar viva es un milagro»
Los momentos posteriores a la explosión en Florida City fueron descritos como aterradores. Luz Tejeda, propietaria de un negocio aledaño al restaurante afectado, relató con la voz entrecortada la violencia del suceso. «Fue una explosión como que si hubiese sido una bomba… cuando yo miro, todo el techo se cayó», narró Tejeda, quien sufrió heridas leves. «Estar viva es un milagro», añadió, visiblemente afectada por la experiencia vivida.
Al arribar las primeras unidades de emergencia, se encontraron con un panorama desolador: llamas activas, escombros esparcidos, y múltiples víctimas, algunas de las cuales necesitaron ser rescatadas de entre los restos de los edificios dañados. La rápida propagación de la noticia generó alarma en toda la comunidad.
Despliegue masivo y respuesta ante la emergencia por explosión en Florida City
Dada la gravedad de la situación y el número de afectados, el Departamento de Bomberos de Miami-Dade activó de inmediato un protocolo MCI (Incidente con Múltiples Víctimas). Este procedimiento implicó el despliegue de más de 27 unidades especializadas, incluyendo equipos caninos K-9, cruciales para la búsqueda y rescate de personas que pudieran haber quedado atrapadas bajo los escombros.
Erika Benítez, portavoz del cuerpo de bomberos, explicó la complejidad de las operaciones: “Se produjo un derrumbe parcial de la estructura y tuvimos que desplegar nuestras unidades caninas porque había preocupación de que personas quedaran atrapadas bajo los escombros”, según declaraciones recogidas por Telemundo 51. La coordinación entre los diferentes cuerpos de emergencia fue vital para atender a los heridos y asegurar la zona.
Investigación en curso y estado de los heridos
De los diez heridos reportados, ocho fueron trasladados de urgencia a hospitales cercanos para recibir atención médica especializada. Dos de estas personas se encuentran en condición crítica, presentando quemaduras de segundo y tercer grado, así como traumatismos severos producto de la onda expansiva y la caída de fragmentos estructurales. La comunidad permanece atenta a su evolución.
Las autoridades han iniciado una exhaustiva investigación para determinar las causas exactas de la explosión en Florida City. Aunque Palm Bakery no estaba operativo, se indaga si pudo haber negligencia en la instalación o el manejo del sistema de gas propano. Equipos de inspectores de estructuras inseguras del condado están evaluando el riesgo de un colapso mayor en el edificio afectado, mientras los peritos en incendios trabajan para esclarecer el origen preciso de la fuga que desencadenó la tragedia.
Como medida de precaución, la zona del siniestro permanece acordonada y varios negocios cercanos han tenido que cerrar sus puertas temporalmente hasta que se garantice la seguridad del área. La investigación determinará las responsabilidades y los pasos a seguir para prevenir futuros incidentes de esta naturaleza.