La dolarización en Cuba continúa su imparable avance en el comercio minorista, con un recuento de al menos 85 tiendas en todo el país que ya operan exclusivamente en dólares estadounidenses. Según un listado publicado por el medio independiente elTOQUE, estos establecimientos no aceptan pagos en Moneda Libremente Convertible (MLC) ni en pesos cubanos (CUP), recibiendo únicamente dólares en efectivo o mediante tarjetas autorizadas como las Clásica, AIS y Tropical del Banco de Crédito y Comercio (Bandec).
Estas tiendas se concentran principalmente en La Habana, pero su presencia se ha extendido a provincias de todo el territorio nacional, desde Pinar del Río hasta Guantánamo, marcando una tendencia creciente.
Expansión de Tiendas en Dólares y Descontento Ciudadano
Aunque las cadenas estatales CIMEX y Tiendas Caribe habían afirmado en su momento que la proporción de tiendas operando exclusivamente en dólares no superaría el 7% del total de sus establecimientos, la cifra actual de más de 85 tiendas supera ampliamente dicho umbral. Muchos de estos comercios han sido reconvertidos a esta modalidad de venta sin previo aviso a la población, lo que ha generado considerable molestia e inconformidad entre los ciudadanos, quienes ven cada vez más limitado su acceso a bienes de consumo en la moneda nacional o incluso en MLC.
El primer establecimiento reportado bajo esta modalidad fue el supermercado ubicado en 3ra y 70, en el barrio de Miramar, La Habana. Dicho local abrió sus puertas en enero pasado sin ningún anuncio oficial por parte del gobierno, aceptando únicamente dólares y presentando precios que, en muchos casos, superan el salario promedio mensual de un trabajador cubano expresado en pesos.
Postura Oficial y Justificación de la Dolarización en Cuba
En diciembre previo a la apertura de esa primera tienda, el primer ministro Manuel Marrero Cruz había anunciado ante la Asamblea Nacional la aprobación de un documento que regulaba la “dolarización parcial de la economía”. Esta medida permitía el uso de divisas extranjeras en sectores clave como el comercio minorista, aeropuertos, clínicas internacionales y el turismo. En esa misma ocasión, Marrero atribuyó parte de la dolarización existente al mercado informal y al sector privado, e indicó que no se permitiría la venta en divisas sin la debida autorización estatal.
Posteriormente, en febrero de este año, autoridades del Ministerio de Comercio Interior (MINCIN) informaron que la empresa mixta Alma Caribe S.A. abriría 50 tiendas en todo el país, de las cuales 48 serían de nueva construcción, operando en esta modalidad. La viceministra Aracelys Cardoso Hernández explicó que la medida respondía a la escasez de oferta en moneda nacional y buscaba captar divisas como una forma de sostener el comercio interno. También se presentó la sociedad mercantil Mercalhabana S.A., destinada a operar en el comercio mayorista y minorista con divisas y a participar en asociaciones con capital extranjero.
Críticas de Expertos al Modelo Dolarizado
El economista cubano Pedro Monreal ha sido una de las voces críticas respecto a este modelo de comercialización en divisas. Monreal ha señalado que esta estrategia no garantiza la disponibilidad de insumos ni una producción estable, y que parece priorizar la expansión de la infraestructura comercial estatal en detrimento de otras áreas productivas. También ha destacado que el comercio dolarizado sigue siendo controlado mayoritariamente por empresas estatales, mientras que el sector privado cubano permanece en gran medida excluido de estas operaciones a gran escala.
Nuevos Llamados a Captar Divisas en Medio de la Crisis
En días recientes, durante una reunión del Consejo de Ministros, el gobernante Miguel Díaz-Canel indicó que la obtención de divisas debe ser una prioridad económica fundamental. Sugirió la necesidad de buscar ingresos en divisas “por vías distintas a las tradicionales” y mencionó la urgencia de atraer inversión extranjera y avanzar en el proceso de bancarización del país.
Estas declaraciones se producen en un contexto económico extremadamente complejo para Cuba, marcado por una drástica caída del turismo, incumplimientos en los planes de exportación, una baja producción agrícola y una severa crisis de liquidez. Todos estos factores afectan directamente la disponibilidad de productos básicos en el mercado nacional y presionan al gobierno a buscar fuentes de ingreso en moneda fuerte, siendo la dolarización en Cuba una de las vías exploradas, aunque controvertida.
Preguntas Frecuentes sobre la Dolarización en Cuba
¿Qué implica la dolarización parcial en Cuba?
La dolarización en Cuba, en su forma parcial, implica que ciertas tiendas y sectores económicos operan exclusivamente en dólares estadounidenses, restringiendo el uso de la Moneda Libremente Convertible (MLC) y del peso cubano (CUP) para la compra de determinados bienes y servicios. Esta medida, según el gobierno, busca captar divisas en un contexto de escasez, pero tiene como consecuencia una mayor segmentación del mercado y exacerba las desigualdades sociales, ya que una gran parte de la población cubana no tiene acceso regular a dólares.
¿Cuántas tiendas en Cuba operan exclusivamente en dólares?
Actualmente, según informes de medios independientes, al menos 85 tiendas en Cuba operan exclusivamente en dólares estadounidenses. Estas tiendas están repartidas por todo el país, desde La Habana hasta Guantánamo, y solamente aceptan dólares en efectivo o mediante tarjetas bancarias internacionales o nacionales autorizadas para operar con esta divisa.
¿Cómo afecta la dolarización al acceso de los cubanos a productos básicos?
La dolarización en Cuba limita significativamente el acceso de la mayoría de los cubanos a una gama cada vez más amplia de productos, incluyendo algunos considerados básicos, ya que muchos no perciben ingresos en divisas ni tienen acceso fácil a ellas. Mientras las tiendas que operan en dólares suelen estar mejor surtidas, aquellas que venden en moneda nacional o MLC enfrentan un desabastecimiento crónico, lo que aumenta la frustración y el malestar social.
¿Qué sectores de la economía cubana están involucrados en la dolarización parcial?
La dolarización en Cuba abarca diversos sectores económicos, incluyendo el comercio minorista y mayorista de bienes de consumo, servicios turísticos, clínicas internacionales, operaciones en aeropuertos y otros espacios económicos considerados estratégicos por el Estado. Estos sectores aceptan dólares en efectivo o mediante tarjetas habilitadas, con el objetivo principal de captar divisas para hacer frente a la profunda crisis económica que atraviesa el país.