En una operación militar de gran envergadura, Estados Unidos ha atacado tres instalaciones clave del programa nuclear de Irán. La ofensiva combinó el uso de bombarderos sigilosos B-2 Spirit y misiles de crucero Tomahawk, según confirmaron fuentes oficiales, en una de las acciones más contundentes contra Teherán en décadas. El presidente Donald Trump anunció el éxito de la misión con una frase contundente: «Fordow desapareció».

¿Cómo se ejecutó el ataque a las instalaciones nucleares?
La operación se desplegó durante la madrugada del sábado. Un total de seis bombarderos estratégicos B-2 Spirit despegaron desde la Base Aérea Whiteman, en Missouri, para un vuelo de 37 horas sin escalas, posible gracias a múltiples reabastecimientos aéreos. El objetivo principal fue la planta de enriquecimiento de Fordow, considerada el corazón del programa nuclear iraní por su ubicación a 90 metros bajo tierra.
Según fuentes del Pentágono citadas por medios como The New York Times, los B-2 lanzaron una docena de bombas antibúnker GBU-57, de aproximadamente 13,600 kilos cada una. Estas municiones, diseñadas para penetrar estructuras subterráneas reforzadas, habrían destruido por completo la instalación.
- Fordow: Destruida con 12 bombas antibúnker GBU-57.
- Natanz e Isfahán: Atacadas con 30 misiles de crucero Tomahawk lanzados desde submarinos.
- Refuerzo en Natanz: Un B-2 adicional lanzó dos bombas GBU-57 sobre esta planta.
La confirmación oficial y las pruebas del ataque
El presidente Trump utilizó su red social Truth Social para confirmar la operación, citando a un usuario y añadiendo su propio mensaje. «¡Ahora es el momento de la paz! Se lanzó una carga completa de bombas sobre el sitio principal, Fordow», publicó. Posteriormente, elogió la ejecución de la misión: «Una operación como el mundo no ha visto en muchas, muchas décadas».
Declaraciones del Presidente sobre la operación militar contra el programa nuclear de Irán. pic.twitter.com/example
— The White House (@WhiteHouse) Junio 21, 2025
Como evidencia adicional, el sistema de información sobre incendios de la NASA (FIRMS) registró una potente emisión de calor en la zona de Fordow aproximadamente media hora antes del anuncio, lo que corrobora la magnitud del bombardeo.
Reacciones y amenazas: la respuesta de Irán
La respuesta de Irán fue inmediata. Aunque las autoridades de la provincia de Qom aseguraron que «no hay peligro para la población», la televisión estatal lanzó una amenaza directa, declarando que «cada ciudadano estadounidense o miembro del Ejército en la región es ahora un objetivo legítimo». Por su parte, el diario Tehran Times publicó un titular desafiante: «¿Cuántos ataúdes enviará Trump a casa por el bien de Israel?».
Los hutíes en Yemen, aliados de Irán, se sumaron a las advertencias, responsabilizando a Trump y amenazando con ataques a buques de guerra estadounidenses en el mar Rojo. En declaraciones recogidas por Fox News, Trump reafirmó su postura: «No buscamos un alto al fuego. Buscamos una victoria total y completa. Ya saben cuál es la victoria: nada de armas nucleares«.
Este ataque marca un punto de inflexión en la crisis entre Washington y Teherán, dejando al mundo expectante sobre si conducirá a una escalada bélica regional o si forzará una nueva vía de negociación sobre el programa nuclear de Irán.