La crisis energética en la isla se agudiza, sometiendo a millones de cubanos a una nueva jornada de apagones en Cuba que se extienden sin descanso. La Unión Eléctrica (UNE) confirmó que el servicio estuvo afectado durante las 24 horas del martes y que la situación para este miércoles, 18 de junio, sigue siendo crítica, con un déficit que supera los 1.200 megavatios (MW) desde la mañana.

Un Déficit Energético que No Da Tregua: Las Cifras del Colapso
Según el parte oficial de la UNE, la máxima afectación del día anterior alcanzó los 1.763 MW en horario pico, una cifra que superó todas las previsiones. El panorama para este miércoles es igualmente desolador, con una incapacidad estructural del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) para satisfacer la demanda del país.
Momento del Día (Miércoles) | Disponibilidad (MW) | Demanda (MW) | Déficit (MW) |
---|---|---|---|
Mañana (7:00 a.m.) | 1.810 | 3.000 | 1.213 |
Noche (Proyección) | 1.841 | 3.500 | 1.659 |
Ni siquiera la reciente incorporación de 16 parques solares fotovoltaicos ha logrado mitigar el problema, demostrando la profundidad de una crisis que la población ya no tolera.
«Ño, ñoooooo»: La Furia y Desesperación de los Cubanos en Redes
La publicación del parte diario de la UNE desató una avalancha de comentarios cargados de frustración, enojo y desesperación. Los ciudadanos usan las redes sociales como un canal para expresar un agotamiento que se ha vuelto insostenible.

Las voces de la calle reflejan el sentir general:
- “23 horas sin corriente entre ayer y hoy y ya el déficit de hoy es mucho más grande. ¿Por qué demonios no acaban de decidir lo que hace rato debían haber decidido?”
- “Estamos cerca de un black out. Ño, ñoooooo.”
- “Decían que los paneles solares iban a mejorar y ha sido peor.”
- “Cada día el SEN está en peor condición, ya no llegamos a los 1.900 MW de disponibilidad.”
Crecen los Llamados a la Responsabilidad Política
Más allá de la queja, el descontento social está escalando hacia la exigencia de responsabilidad política. Las críticas directas al Ministerio de Energía y Minas y las peticiones de dimisión de sus dirigentes son cada vez más frecuentes en las plataformas digitales. Este malestar evidencia un agotamiento profundo ante una crisis que afecta todos los aspectos de la vida diaria, desde la conservación de alimentos hasta la salud, y que no parece tener una solución a corto plazo.