Un video que circula con fuerza en redes sociales ha puesto de nuevo el foco sobre la grave crisis sanitaria en Cuba. En las imágenes, un ciudadano cubano graba desde el interior de una habitación de hospital para denunciar, con visible frustración, las condiciones precarias que enfrentan los pacientes. El testimonio, compartido originalmente por el usuario Leo Molero en Instagram, se ha convertido en un potente reflejo de la difícil situación que viven los cubanos en su día a día.
Una denuncia directa desde un hospital cubano
El hombre que protagoniza el video muestra cómo se ha visto obligado a llevar sus propios enseres básicos para poder sobrellevar su estancia en el centro médico. La crudeza de su testimonio radica en la normalización de una situación que considera inaceptable, contrastando la falta de recursos para los ciudadanos con la opulencia de las instalaciones destinadas al turismo internacional en la isla.
¿Qué revela el video sobre la crisis sanitaria en Cuba?
El autor de la grabación denuncia directamente la falta de los suministros más elementales. Según su relato, los pacientes o sus familiares deben proveerse de artículos que cualquier sistema de salud debería garantizar. Entre los elementos que tuvo que llevar personalmente se encuentran:
- Un ventilador para poder soportar el calor en la habitación.
- Su propia agua para consumo personal.
La denuncia del hombre va más allá de la simple queja, calificando la situación de «inhumana» y como una muestra de la desconexión entre las autoridades y la población. La pieza audiovisual resalta una de las críticas más recurrentes: la diferencia abismal entre los servicios disponibles para los turistas y las carencias que sufre el pueblo cubano.
«Miren las condiciones en las que estamos. Esto es inhumano, esto es un descaro… Para los hoteles de los turistas sí hay de todo, para nosotros los cubanos de a pie, no hay nada», exclama el hombre en una de las partes más contundentes del video.
Este tipo de contenido, generado por los propios usuarios, se ha convertido en una herramienta fundamental para visibilizar la realidad interna de Cuba, ofreciendo una perspectiva sin filtros que contradice a menudo la narrativa oficial. La viralización de estas imágenes evidencia un descontento creciente y la necesidad urgente de soluciones a la profunda crisis que afecta al sistema sanitario de la isla.