Un grupo de más de 25 miembros del Parlamento Europeo ha elevado la presión sobre Bruselas, exigiendo el fin inmediato del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (PDCA) con el régimen de Cuba. En una dura carta enviada el pasado 11 de julio, coincidiendo con el cuarto aniversario de las protestas del 11J, los parlamentarios denuncian que los fondos de la UE están siendo utilizados para financiar la maquinaria represiva de la dictadura.
La misiva, encabezada por figuras como el eurodiputado español Hermann Tertsch, acusa a la Unión Europea de mantener una cooperación «criminal» que, en lugar de promover la democracia, sostiene a un régimen que viola sistemáticamente los derechos humanos de su pueblo.
Una Demanda Contundente: «Basta de Financiar la Represión»
Dirigida a la vicepresidenta de la Comisión Europea, Kaja Kallas, la carta detalla una serie de peticiones urgentes. Los firmantes instan a activar la cláusula de derechos humanos del acuerdo UE-Cuba, suspender de inmediato toda transferencia financiera, realizar una auditoría exhaustiva de los fondos ya enviados y sancionar a funcionarios y empresas vinculadas a la élite comunista, incluyendo el conglomerado militar GAESA.
«La política actual no solo es ineficaz, se ha vuelto moralmente indefendible», sentencian los eurodiputados, quienes describen un «colapso sistémico» en la isla mientras cientos de presos políticos son víctimas de torturas y vigilancia constante.

Acusaciones Graves Contra el Régimen y la Política Europea
Los parlamentarios recuerdan que el acuerdo, firmado en 2016, nació con la esperanza de impulsar reformas, pero el régimen «respondió con represión» y, en cambio, ha fortalecido sus lazos con potencias autoritarias como Rusia, China, Irán y Bielorrusia. Acusan a La Habana de apoyar la agresión rusa en Ucrania, citando informes sobre la presencia de miles de mercenarios cubanos en el conflicto.
«Cuba no es una democracia frágil en necesidad de apoyo. Es un régimen autoritario que sobrevive mediante la coerción y la propaganda», advierten, instando a la UE a posicionarse «inequívocamente con el pueblo cubano».
El eurodiputado Hermann Tertsch dedicó su firma «a los héroes de la resistencia a la dictadura comunista de Cuba y a las víctimas de la represión» tras el levantamiento del 11 de julio de 2021. Ver publicación en X.
La Postura de Bruselas: Defender el Diálogo como Única Vía
Esta no es la primera vez que el Parlamento Europeo critica el acuerdo UE-Cuba. Sin embargo, la Comisión Europea ha defendido su vigencia. En una intervención el pasado 6 de mayo, la propia Kaja Kallas argumentó que el pacto es la única herramienta para dialogar con La Habana sobre temas sensibles.
Kallas aseguró que los fondos no financian directamente al gobierno, sino a proyectos de agencias de la ONU y ONGs. «¿Suspender el acuerdo va a liberar a Daniel Ferrer y Félix Navarro? Creo que todos sabemos la respuesta», cuestionó la diplomática, apostando por mantener el canal de comunicación abierto a pesar de reconocer que el acuerdo «no ha producido aún el tipo de cambio que deseamos». Esta postura refleja la profunda división dentro de la UE sobre cómo gestionar la relación con el régimen cubano.