Un análisis de datos recientes confirma que Florida se ha convertido en el epicentro de la nueva estrategia migratoria de la administración Trump, con un alarmante aumento en las detenciones de ICE en Florida. Desde enero de 2025, el estado ha registrado más de 10,800 arrestos, lo que representa un incremento superior al 200% en comparación con el año anterior. Este fenómeno no es casual; responde a una estudiada combinación de factores políticos y operativos que ponen a ciertas comunidades en el punto de mira.
La estrategia se concentra en zonas urbanas con alta población migrante, pero el factor determinante, según revela la información, es el grado de colaboración entre las agencias policiales locales y las autoridades federales de inmigración.
Las 7 Ciudades en el Punto de Mira de ICE
Aunque las operaciones se extienden por todo el estado, siete ciudades concentran la mayor cantidad de arrestos y operativos migratorios durante 2025, conformando el mapa de las zonas de mayor riesgo para la comunidad inmigrante:
- Miami (Miami-Dade): Funciona como el centro neurálgico de ICE, aprovechando la cercanía del centro de detención Krome y la activa colaboración de la policía local.
- Tallahassee (Leon): La capital estatal ha sido objetivo de redadas específicas en lugares de trabajo, particularmente en el sector de la construcción.
- Orlando (Orange): Fue un escenario clave de la «Operation Tidal Wave», una masiva operación coordinada en abril que abarcó zonas residenciales y laborales.
- Jacksonville (Duval): Ha visto un notable incremento de la actividad de ICE, impulsado por leyes estatales que endurecen las penas contra la inmigración irregular.
- Fort Myers (Lee): Fue blanco de operativos directos en vecindarios con alta concentración de población inmigrante.
- Stuart (Martin): Otra de las ciudades incluidas en la «Operation Tidal Wave», con detenciones focalizadas.
- Tampa (Hillsborough): Protagonista también de los operativos de abril, destacando por la estrecha coordinación entre agencias.
El Factor Clave: Por Qué Florida Lidera los Arrestos
La razón principal detrás de las altas cifras de detenciones de ICE en Florida es política: el estado lidera abrumadoramente al país en la firma de acuerdos 287(g). Estos convenios permiten que las agencias de policía estatales y locales actúen como agentes de inmigración federales. Florida cuenta con 295 de estos acuerdos, lo que equivale al 43% del total nacional. En contraste, estados con alta población migrante como California, que tienen políticas que limitan esta cooperación, registran una actividad de ICE mucho menor.
El Rostro Humano de las Cifras: Detenciones sin Historial Criminal
La nueva estrategia de la administración Trump ha cambiado radicalmente el perfil del detenido. Según datos del Proyecto de Datos de Deportación (Deportation Data Project), el 36% de los arrestados en junio de 2025 no tenía antecedentes penales, un aumento del 457% respecto al año anterior. Esto evidencia un cambio de enfoque: de priorizar a quienes representaban una amenaza para la seguridad pública a una política de «tolerancia cero».
El director interino de ICE, Todd Lyons, lo confirmó: «Cualquier persona que se encuentre en el país violando la ley federal de inmigración será detenida».
Esta política ha provocado un aumento de denuncias por separación de familias y por las condiciones en centros de detención como la nueva instalación en los Everglades, apodada «Alligator Alcatraz».
Panorama Nacional y el Objetivo del Millón de Deportaciones
A nivel nacional, la tendencia es similar. Los estados del sur, con políticas afines a la cooperación con ICE, lideran las estadísticas de arrestos.
Estado | Porcentaje del Total de Detenciones Nacionales |
---|---|
Texas | 23.2% |
Florida | 11% |
California | 7% |
Georgia | 4% |
Arizona | 3% |
A pesar del aumento de arrestos, el objetivo de la administración de alcanzar un millón de deportaciones en 2025 parece lejano. Con 150,000 deportaciones ejecutadas hasta la fecha, las proyecciones apuntan a unas 300,000 para fin de año. Aunque no cumpliría la meta, convertiría a 2025 en el año con más expulsiones desde la era Obama, confirmando la intensidad de la actual política migratoria.