Una investigación periodística ha destapado el uso sistemático de privilegios por parte de la élite del régimen cubano, revelando que Mariela Castro usó un pasaporte diplomático, al igual que su poderoso sobrino «El Cangrejo» y otros familiares de Raúl Castro, para realizar múltiples viajes de placer y con estancias prolongadas en Estados Unidos. Estos viajes, financiados y gestionados por el Estado cubano, exponen una profunda hipocresía que contrasta con el discurso oficial antiestadounidense y las penurias que vive el pueblo de la isla.
El análisis de los documentos confidenciales filtrados, publicados por Martí Noticias, no solo confirma sospechas, sino que detalla un modus operandi donde las reuniones en la ONU servían como pretexto para obtener visas, protección del Departamento de Estado y acceso a un estilo de vida de lujos en el corazón del «imperio».
Documentos oficiales de la dictadura cubana a los que tuve acceso confirman que Raúl Castro autorizó el uso de pasaportes diplomáticos y financió los viajes a Estados Unidos de su hija Mariela, su nieto y jefe de su seguridad personal, Raúl Guillermo Rodríguez Castro (El Cangrejo),… pic.twitter.com/f4D0nOHrA2
— Mario J. Pentón (@MarioJPenton) August 2, 2025
Mariela Castro y «El Cangrejo»: Figuras Clave del «Turismo Diplomático»
Los documentos filtrados del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX) señalan a figuras de alto perfil. Mariela Castro, directora del CENESEX e hija de Raúl Castro, viajó en 2015 a Nueva York para supuestas reuniones en la ONU, pero lo hizo acompañada de sus hijos, su esposo y una funcionaria, todos con estatus diplomático y con una estancia que superó las tres semanas. Esta no fue su única visita; ya en 2012 había generado polémica por su presencia en San Francisco, donde incluso recibió protección especial del Departamento de Estado.
Junto a ella destaca su sobrino, Raúl Guillermo Rodríguez Castro, alias «El Cangrejo», jefe de la seguridad personal de Raúl Castro. Este pilar del aparato represivo también viajó a EE.UU. en varias ocasiones con un visado diplomático justificado por «reuniones del sistema de Naciones Unidas», un argumento que parece haber sido el comodín para la élite.
La lista de beneficiarios se extiende e incluye a:
- Lisa y Paolo Titolo Castro: Nietos de Raúl Castro que acompañaron a su madre, Mariela.
- Vilma Rodríguez Castro: Otra nieta de Raúl e hija del fallecido general Luis Alberto Rodríguez López-Callejas, el zar del conglomerado militar GAESA.
- Altos oficiales del MININT: Nombres como Humberto Francis Pardo y Rafael Arturo Fong Puig también figuran en los registros.
Una Práctica Hipócrita que Desata Indignación
La revelación de que Mariela Castro usó un pasaporte diplomático para fines personales ha sido calificada como un acto de máxima hipocresía por el propio gobierno estadounidense. Un portavoz del Departamento de Estado fue contundente al respecto, subrayando la desfachatez del régimen.
“Mientras el pueblo cubano sufre hambre, vive sin electricidad y sobrevive en pobreza extrema, los funcionarios del régimen, sus familias y la élite cubana siguen viajando con lujos al extranjero”.
Esta doble moral es el motor de la indignación en el Congreso de EE.UU., donde varios legisladores cubanoamericanos ya han exigido sanciones inmediatas y la prohibición de entrada para los familiares y cómplices de la dictadura. El escándalo no solo pone el foco en la corrupción y el nepotismo del castrismo, sino que cuestiona la efectividad de las políticas estadounidenses que, durante el «deshielo», permitieron este tipo de abusos, facilitando que la cúpula cubana disfrutara de las libertades que niega a su propio pueblo.