Ante la creciente preocupación por la detención de inmigrantes cubanos con el formulario I-220A al acudir a su cita en la corte de inmigración, la abogada Laura Jiménez ofreció una serie de consejos vitales para quienes enfrentan este proceso. En una conversación con Telemundo 51, la experta detalló las estrategias y riesgos actuales en un sistema migratorio cada vez más estricto.
El formulario I-220A, una orden de libertad bajo supervisión, no confiere un estatus legal de entrada, dejando a los migrantes en una posición vulnerable. Si un juez cierra su caso, pueden enfrentar una deportación expedita, especialmente si llevan menos de dos años en el país.
La Regla de Oro: Asistir Siempre con un Abogado
La primera y más importante recomendación de Jiménez es nunca perder la esperanza y, sobre todo, acudir a cada audiencia acompañado de un abogado de inmigración. La experta fue enfática en que la representación legal es crucial para protegerse.
«Es imprescindible«, recalcó la abogada, explicando que un profesional sabrá cómo actuar ante los intentos del fiscal de cerrar el caso, lo que podría facilitar una deportación inmediata.
Un abogado puede presentar «un escrito legal en oposición al argumento del fiscal», una acción que, aunque no garantiza un resultado favorable con todos los jueces, «hay que hacer ese trabajo», pues puede marcar una diferencia determinante en el futuro del inmigrante.
Estrategias Legales para Evitar la Deportación
Además de la oposición directa en la corte, la abogada destacó las apelaciones como una herramienta fundamental para ganar tiempo y evitar una deportación inmediata. El proceso de apelación tiene un efecto protector clave para el inmigrante.
- Caso pendiente: Mientras un caso está en apelación, los procedimientos de deportación se mantienen técnicamente abiertos y pendientes.
- Protección contra deportación: Debido a que el caso sigue abierto, ICE está prevenido de ejecutar una deportación expedita.
- Posibilidad de detención: «Lo pueden tener detenido, pero no lo van a poder deportar. Esa es una forma de proteger al cliente», señaló Jiménez.
El Peligro de la Entrevista de Miedo Creíble
Con respecto a la estrategia de solicitar una entrevista de miedo creíble, la abogada fue tajante al advertir sobre sus bajas probabilidades de éxito en el contexto actual. Según Jiménez, las directrices del Departamento de Seguridad Nacional han endurecido los criterios, haciendo que esta vía sea muy difícil.
Además, denunció que este camino conlleva graves inconvenientes para los solicitantes, quienes son trasladados constantemente entre centros de detención. La entrevista, que por ley debería ocurrir en siete días, «está tardando más de tres semanas». Durante este tiempo, alertó que «los abogados no están teniendo acceso a los clientes en los centros de detención», dejándolos en una situación de total indefensión.
La recomendación final es clara: quienes enfrentan una cita en la corte de inmigración deben buscar asesoría legal especializada, informarse a fondo sobre su caso y actuar con responsabilidad para aumentar sus posibilidades de protección.