Una jueza federal ha emitido una orden que bloquea parcialmente la suspensión de varios programas clave de parole humanitario implementados por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), ofreciendo así un importante alivio temporal a miles de inmigrantes. La decisión, tomada por la jueza Indira Talwani del Distrito de Massachusetts, responde a una demanda colectiva presentada por individuos que ingresaron legalmente a Estados Unidos bajo estos programas y que se vieron afectados por recientes directrices que detenían el procesamiento de sus solicitudes.
Beneficiarios de la Decisión Judicial sobre el Parole Humanitario
Entre los principales beneficiados por este bloqueo a la suspensión del parole humanitario se encuentran nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que ingresaron al país a través del parole humanitario o mediante el programa de reunificación familiar. Además, la orden judicial protege programas específicos como Uniting for Ukraine, que permite el ingreso temporal de ciudadanos ucranianos desplazados por la guerra, y Operation Allies Welcome, que facilitó la llegada de afganos que colaboraron con Estados Unidos. De igual modo, se benefician los protegidos por el Parole Militar en el Lugar (MPIP, por sus siglas en inglés), que acoge a familiares indocumentados de miembros activos o veteranos de las fuerzas armadas estadounidenses.
Fundamentos de la Demanda y Alcance del Bloqueo
La demanda alega que las directrices emitidas por funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) y el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) —todas agencias del Departamento de Seguridad Nacional (DHS)— para detener los trámites, violaron procedimientos legales establecidos. Sostienen que estas acciones pusieron en grave riesgo el estatus legal, el acceso a servicios esenciales y la estabilidad familiar de miles de personas. Entre los demandantes figuran trabajadores humanitarios ucranianos, refugiados afganos y ciudadanos estadounidenses que buscan proteger a sus familiares a través del parole militar.
Es crucial destacar que, si bien la decisión de la jueza Talwani no anula las órdenes ejecutivas firmadas por el presidente Trump en enero relacionadas con estos programas, sí impide que se apliquen de manera generalizada y indiscriminada mientras el caso se resuelve definitivamente en los tribunales. Este freno judicial representa una victoria significativa, aunque temporal, para los defensores de los derechos de los inmigrantes y para las miles de familias afectadas por el bloqueo al parole humanitario.