El 160º Regimiento de Aviación de Operaciones Especiales, capaz de infiltrar fuerzas de élite en zonas de alto riesgo, ha sido desplegado en el Caribe en una muestra de fuerza hacia el régimen de Maduro.

Un grupo de élite del Ejército de EE.UU., capaz de infiltrar a algunas de las fuerzas de operaciones especiales más letales del país en combate, ha sido desplegado en el Caribe mientras el presidente Trump ejerce una creciente muestra de fuerza hacia Venezuela. El 160º Regimiento de Aviación de Operaciones Especiales, conocido como los «Night Stalkers», opera helicópteros de ataque como los MH-60 Black Hawk y pequeños helicópteros de transporte en las situaciones más peligrosas. A principios de mes surgió un video que mostraba a los Black Hawk y a los más pequeños ‘Little Birds’ realizando entrenamientos en Trinidad, ubicada a unas 500 millas al este de Caracas.



Los «Night Stalkers» pueden depositar en zonas de batalla a fuerzas altamente entrenadas, como los Navy SEALs, los Boinas Verdes del Ejército o el personal de la Fuerza Delta. Mark Cancian, un experto en defensa y coronel de Marines retirado, señaló que el entrenamiento con tales aeronaves indica prácticas para posibles misiones contra carteles de drogas -o incluso contra el propio régimen de Maduro. «El 160º podría llevar fuerzas de operaciones especiales a Venezuela para atacar objetivos de carteles o del régimen. No lo espero por el riesgo de bajas o capturas, pero es posible», señaló Cancian. Este movimiento se produce después de que Trump confirmara que autorizó acciones encubiertas de la CIA dentro de Venezuela para combatir el narcotráfico.














