En Sagua la Grande, Villa Clara, la polémica volvió a encenderse alrededor del llamado “empresario” Daril Blanches, conocido por sus nexos con el Intendente municipal, Adolfo Sarmiento Abreu. Esta vez, por la fastuosa celebración de los 15 años de su hija.
La fiesta, que se extendió hasta las 6:00 de la mañana, contó con dos agrupaciones musicales y la participación especial del cantante juvenil Brayan Ramos (BR), uno de los favoritos de la quinceañera. Todo ello, bajo la mirada atenta de policías y efectivos del DTI, que custodiaban el lugar mientras el resto del pueblo sufría apagones de más de 20 horas diarias.
Entre el lujo y el descontrol, se realizó la rifa de una motorina, donde los boletos y las mesas estaban reservados para funcionarios del gobierno local, reforzando las críticas sobre el acceso exclusivo de las élites a privilegios que el ciudadano común jamás disfruta.
En Sagua ya se habla de rumores de un millonario robo de 5 millones de pesos, donde estarían implicados Blanches y otras figuras cercanas a las autoridades. Vecinos denuncian irregularidades en permisos, excesiva vigilancia policial y manipulación de recursos, lo que confirma la creciente influencia de los llamados “nuevos ricos de la dictadura”.
La pregunta que hoy resuena en las calles es inevitable:
¿Hasta dónde llegan los vínculos oscuros entre empresarios favorecidos y las autoridades locales en Cuba?














Fuente: La tijera













